martes, 19 de junio de 2007

Encuentro Programado




Llegó el momento, resalta mi puntualidad
Aún no llega, y ya siento como se empieza a elevar mi temperatura corporal
Los nervios me traicionan
Y gotas de sudor entrelazan mis dedos

Observo, con la esperanza de poder reconocerlo antes de que me sorprenda
Una llamada diciendo, no tarda en llegar
Ahora si, vista fija en la puerta,
Se me resecan los ojos, por no querer parpadear

Todo parece coincidir, es él
Haré de cuenta que no percibí su entrada
Ya está, me reconoció
No hay marcha atrás, espero que mis nervios no me expongan

Muy tarde, luego del saludo,
Siento como mi presión sistólica aumenta,
Y con una sola parada en mi pabellón auricular derecho,
No hay duda, mi oreja resalta como si le hubiera picado una avispa

Acepto mi derrota, y sonrió a mi debilidad
Así soy, es mi manera
Deje de pensar y solo me deje llevar
Deje de controlar y luego todo volvió a la normalidad

Paso de ser un encuentro programado a un encuentro casual
Que más da, me la pase genial.

4 comentarios:

HOSTOBEN dijo...

Tu uso de las palabras y el pensamiento te permiten conjugar el cuerpo y alma y hacerle los bordes con sentimiento a este retrato de tu vida.

HOSTOBEN dijo...

Tu uso de las palabras y el pensamiento te permiten conjugar el cuerpo y alma y hacerle bordes con sentimientos a este retrato de tu vida.

Anónimo dijo...

María:

No sabía que eres una poeta, disfruté mucho de tus entradas, te quiero y te extraño siempre que no se de ti.

Beto.

Humberto Jaime Alarid dijo...

María:

Muchas felicidades por tu blog, en verdad escribes bien.

Que bueno que solo te subió la presión sistólica, porque la peligrosa es la diastólica.

Me autorizas a publicar algún pensamiento tuyo en mi blog?

Saludos Cordiales